"... el inesperado éxito de mis libros proviene, según creo, en última instancia de un vicio personal, a saber: que soy un lector impaciente y de mucho temperamento. Me irrita toda facundia, todo lo difuso y vagamente exaltado, lo ambiguo, lo innecesariamente morboso de una novela, de una biografía, de una exposición intelectual. Sólo un libro que se mantiene siempre, página tras página sobre su nivel y que arrastra al lector hasta la última línea sin dejarle tomar aliento, me proporciona un perfecto deleite. Nueve de cada diez libros que caen en mis manos, los encuentro sobrecargados de descripciones superfluas, diálogos extensos y figuras secundarias inútiles, que les quitan tensión y les restan dinamismo."
Stefan Zweig
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El escritor austriaco Stefan Zweig (Viena 1881-Petrópolis-Brasil 1942)

Zweig y la Novela de Ajedrez

De Zweig me gusta hasta su impronunciable apellido: corto, contundente y sonoro. Zweig siempre resulta una apuesta segura y no sólo por ser uno de los escritores austríacos más importantes del pasado siglo XX, sino por profundizar con maestría en los demonios personales que angustian a sus protagonistas. Algo de ello debía de conocer este hombre que acabó suicidándose 1942 en Río de Janeiro.

La novela transcurre en un viaje en barco de Nueva York a Buenos Aires. Mirko Czentovicz, actual campeón del mundo de ajedrez, se encuentra entre los pasajeros. Si habitualmente se tiende a pensar que los buenos jugadores de ajedrez tienen una inteligencia destacable, no es el caso de Czantovicz cuya incapacidad de jugar “a ciegas”, es decir, de proyectarse el tablero le hacían objeto de burlas y comentarios por su falta de imaginación. A bordo del barco se encuentra McConnor, un self-made-man poco consciente de su falta de maestría en el juego que reta al campeón a una partida previo pago por sus servicios. Como es de esperar, Mirko gana la primera partida jugada simultáneamente contra McConnor y su grupo. Pero a la segunda partida, una persona del público comienza a sugerir jugadas que lleva a tablas el resultado final. El señor B como conoceremos a este anónimo espectador será invitado a jugar una partida contra el campeón. El señor B es un noble vienés que huye de los nazis. Su historia nos será desvelada por uno de los pasajeros del barco. En ella relatará sus angustiosos meses de encierro en una casa, privado de todo estímulo intelectual, con plena conciencia del transcurrir del tiempo y sin nada que hacer. Un inevitable paseo por los infiernos cuyo encuentro final es su propia locura. Una forma de tortura sutil, que desnutre la mente cual ávido gusano. “No nos hacían nada, se limitaban a situarnos en el vacío más absoluto, y es bien sabido que nada en el mundo puede oprimir tanto el corazón del hombre como la nada. (…) Ni la vista ni el oído ni ningún otro sentido recibían, ni de noche ni de día, estímulo alguno: me hallaba solo con mi cuerpo y cuatro o cinco objetivos mudos: la mesa, la cama, la ventana, el aguamanil…. Desesperadamente solo. Vivía como un buzo bajo la campana de cristal en el negro océano de aquel silencio; un buzo que presiente que se ha roto ya la cuerda que le unía al mundo exterior y que nunca más será rescatado de aquellas calladas profundidades” (p.47-48) La mente inicia juegos obsesivos: recitar textos, recordar canciones, hacer cálculos,… cualquier cosa con tal de tener estar ocupada. En uno de sus interrogatorios, el señor B tiene ocasión de robar un libro: un salvavidas en el universo estéril en el que se haya inmerso. Pero las hojas no contienen ninguna historia con la que evadirse de su prisión, sino un repertorio de ciento cincuenta partidas de ajedrez. El señor B comenzará a jugar concentrando su energía y pensamiento en replicar las partidas, a tal punto que memorizadas todas las jugadas, solo le quedará la opción de jugar contra sí mismo. “(…) el único encanto del ajedrez reside precisamente en el despliegue diferente de una estrategia en dos cerebros, en el hecho de que no sepan las negras cuál será la maniobra correspondiente de las blancas en esta guerra del intelecto (…) Si una misma persona juega con las blancas y con las negras, se produce entonces una situación incongruente, en donde un mismo cerebro ha de saber y al mismo tiempo no saber (…) Un doble pensamiento como éste presupone en realidad una escisión absoluta de la conciencia, una capacidad de enfocar y desenfocar el cerebro como si fuese un aparato mecánico: querer jugar contra uno mismo representa, en definitiva, una paradoja tan grande en ajedrez como querer saltar sobre la propia sombra” (p.65-66). Para el ajedrez como para el amor resulta imprescindible una pareja o un contrincante –según se mire-. El juego –o las circunstancias- provocarán en el señor B una “esquizofrenia artificial” que le arrojará al delirio pero que supondrá su liberación y su condena. No en vano se ha llamado al ajedrez “juego de guerra” o “jaque mate” supone una alteración de la expresión árabe [ash-]shah mat que significa literalmente “(el) rey ha muerto”. “(…) ese juego entre los juegos, el único entre los ideados por le hombre que escapa soberanamente a cualquier tiranía del azar, y otorga los laureles de la victoria exclusivamente al espíritu, o mejor aún, a una forma muy característica de agudeza mental.” (p.17) La partida se llevará a cabo con la condición de sólo jugarse una. El señor B ganará con diferencia y el delirio nuevamente presa de él le empujará a jugar la segunda y decisiva partida. Me gustaría pensar que en determinadas ocasiones tenemos oportunidad de asomarnos al abismo y contemplar dónde conduce el precipicio… dejo a vuestra reflexión su posible final.

NOVELA DE AJEDREZ (Stefan Zweig)

Una vez finalizado el trabajo para la “Novela de ajedrez” en los primeros días del año 1942, apuntó que la novela era “demasiado abstracta para el gran público”, el tema demasiado peculiar y adicionalmente escrita en un formato inoportuno:
‘demasiado larga para una revista, demasiado corta para un libro’.
Sin embargo, la “Novela de ajedrez” se convirtió en la obra más entrañable y duradera de Stefan Zweig para sus lectores.
Cuando se llevó a la pantalla su obra con la participación del famoso actor Curd Jürgens como protagonista principal en el año 1960, ya se habían publicado innumerables ediciones en casi todos los idiomas.
La historia de la lucha del abogado vienés Dr. B. con el Campeón del Mundo de Ajedrez Czentovic durante el viaje de emigración, fue el último texto en prosa que escribió antes de suicidarse el 23 de febrero 1942 en su exilio en el Brasil.
Desde sus años del colegio, Stefan Zweig se familiarizó con el juego de ajedrez:
“Solamente en el juego de ajedrez encuentra a su modo de ver cierta clemencia porque se exigió asimismo un gran esfuerzo mental”.
El juego de ajedrez le acompañó hasta el final de sus días.
Para vivir la soledad del exilio se compró un libro de ajedrez y cada día repasaba con su esposa Lotte las partidas de los maestros.
De esta manera, la “Novela de ajedrez” contiene tintes autobiográficos.
Durante las partidas con Czentovic, B. se le recuerda. Fue arrestado por la GESTAPO y durante meses estuvo aislado del mundo exterior.
Sin embargo, un libro de ajedrez y la posibilidad de repasar y analizar las partidas le permitió la huída del vacío de espacio y del tiempo, que le ocasionaron su aislamiento.
Mediante el juego de ajedrez resiste B. a los interrogatorios, pero a medida que transcurre el tiempo se le contagia una fiebre ajedrecista, que le empuja al borde de la locura.
B. sobrevive y escapa del peligro doble para un intelectual:
De los esbirros “nazis” y la tortura real así como del sueño de maldecir el mundo del ajedrez y de su carácter ilusorio.
La “Novela de ajedrez” puede leerse también como un manifiesto político; la advertencia de Zweig por Charybdis y Skylla de lo intelectual sigue vigente.
Nota: Según la mitología griega, Chrybdis es un monstruo del mar frente a Skylla, que tres veces al día ‘chupa’ la marea alta y la ‘escupe’ con la consecuencia que los navegantes se encuentran en apuros. Se la localizó en el estrecho de Messina.

CZENTOVIC vs. DR. B. (Alekhine vs.Bogoljubow)

El ejemplo para el primer encuentro entre Czentovic y Dr. B. es la siguiente partida:

Alekhine, Alexander - Bogoljubow, Efim [C84] Bad Pistyan (15), 1922

1.e4 e5 2.Cf3 Cc6 3.Ab5 a6 4.Aa4 Cf6 5.0–0 Ae7 una defensa española, clásica y tranquilamente celebrada. 6.Cc3 b5 7.Ab3 d6 8.a4 hoy en su día apenas ya se juega esta variante, después de tener unos 70 años para verificar la bondad de esta jugada. 8... b4 9.Cd5 Si las blancas quieren mantener este peón, se recomienda 9. Ad5 Ab7 10. Ca2. 9...Ca5 para jugar 9...Cxe4 se necesita una osadía: 10. Cxe7 Cxe7 (10.....Dxe7? 11. Ad5 Ab7 12. Axe4) y el par de alfiles tomará las palabras 10.Aa2 Cxd5 11.Axd5 c6 12.Aa2 c5 13.c3 Tb8 14.Ad5 0–0 15.d4 exd4 Las negras han equilibrado la posición y podría cambiar las piezas mediante 15....bxc3!? 16. bxc3 exd4 17. cxd4 Af6.16.cxd4 c4 17.Ae3 Ae6 No aportan nada 17....Cb3 18. Ta2 Ae6 19. Axe6 fxe6 18.Axe6 fxe6 19.d5 e5 Empieza una lucha de doble fila: Las negras insisten en su mayoría en el ala de dama, mientras las blancas deben buscar todavía una iniciativa dudosa en el ala del rey. 20.Tc1 Dd7 21.Cg5 Axg5 Ya está la misma. 22.Axg5 Tbc8 23.De2 h6 24.Ah4 Tf7 25.Ag3 Dxa4 26.f4! La única posibilidad de no hundirse sin ceremonias. 26....exf4 27.Axf4 Db5 Más atento hubiera sido 27....Dd7!? con la cobertura del ala del rey. 28.Axh6! La sensibilidad misteriosa de Alekhine para la iniciativa. 28...c3! ¡El contraataque acertado en el momento justo! 28....Txf1+ (28...gxh6? 29. Dg4+) 29. Txf1 Te8 30. Axg7! Dd7 (30...Rxg7 31. Dg4+ Rh8 32. Dh5+ Rg8 33. Tf7 se convierte en mate) 31. Dh5! Pierde. 29.Dg4 Las blancas no ceden. Dd7 30.Dxd7 Txd7 31.bxc3! Para las negras son favorables 31. Af4?! Cb3 32. Tc2 Cd4. 31... bxc3 Después de 31....gxh6 32. cxb4 Cc4, las posibilidades de tablas son grandes para las blancas. 32.Ad2! Equilibra el juego. Tdc7 33.Af4 Cb3 34.Axd6! Ahora los peones blancos centrales toman la palabra. 34... Tf7 35.Txf7 Cxc1 36.Tf1 Cd3 37.Aa3 c2 38.d6!

¡Esta es la posición de Dr. B. en la partida contra Czentovic! Si las negras (Dr. B.) avanzan el peón c2 para la conversión en dama, pierden claramente: 38....c1D? 39. Axc1 Cxc1 40. d7 Td8 41. Txc1 con una final ganada por las blancas. Por esto 38. ...Rh7! 39. h4 Un último intento. 39.... Tc4 40.e5 Cxe5 41.Ab2 Tc8 42.Tc1 Cd7 La jugada 42....Cd3? 43. Txc2! Txc2 44. d7. 43.Rf2 Rg6 44.Re3 Tc6 45.Ad4 Cf6 46.Rd3 Txd6 47.Txc2
Ahora se ha difumado el orgullo de la posición y la partida ya no puede ser ganada por ninguna de las partes. ¡Por esta razón: tablas!

Si la “Novela de Ajedrez” nos presenta el choque de dos naturalezas antagónicas, nos muestra también, y en buena medida, la capacidad de resistencia del ser humano sometido a una presión extraordinaria.